Salmo 140 (139)

Señor Dios,
mi fuerte salvador.
Salmo de súplica. Individual
De confianza.


Tema


Un hombre que vive bajo la opresión de los enemigos, acude a Dios con confianza. El pobre que vive oprimido ya sabe que Dios le mirará con benevolencia. Este salmo ha alcanzado la plena iluminación en la Pasión y Resurrección de Cristo.
  2-6: Acude a Dios dándole cuenta de la actuación de los enemigos. Emplea dos imágenes para manifestar la maldad de los enemigos: la de la culebra (4) y la del cazador (6).
  7-8: El salmista confiesa toda la confianza que tiene en Dios.
  9-12: Pide la justicia de Dios contra los enemigos.
13-14: El salmista confía plenamente en alcanzar lo que ha pedido a Dios (13). Oración de acción de gracias (14).

Salmo


  2 Líbrame, Señor, del malvado,
     guárdame del hombre violento:

  3 que planean maldades en su corazón,
     y todo el día provocan contiendas;

  4 afilan sus lenguas como serpientes,
     con veneno de víboras en los labios.

  5 Defiéndeme, Señor, de la mano perversa,
     guárdame de los hombres violentos:
     que preparan zancadillas a mis pasos.

  6 Los soberbios me esconden trampas;
     los perversos me tienden una red
     y por el camino me colocan lazos.

  7 Pero yo digo al Señor: «Tú eres mi Dios»,
     Señor, atiende a mis gritos de socorro;

  8 Señor Dios, mi fuerte salvador,
     que cubres mi cabeza el día de la batalla.

  9 Señor, no le concedas
     sus deseos al malvado.

10 No des éxito a sus proyectos:
     que los cubra la perfidia de sus labios;

11 que les lluevan encima ascuas encendidas,
     que caigan en hoyos y no puedan levantarse.

12 Que el deslenguado no se afirme en la tierra,
     que al violento lo cace la desgracia.

13 Yo sé que el Señor hace justicia al afligido
     y defiende el derecho del pobre.

14 Los justos alabarán tu nombre,
     los honrados habitarán en tu presencia.


Palabras clave


- Ataque del enemigo: Hombre malvado (2), mano perversa (5), violento (2.5), planean maldades en su corazón (3), provocan contiendas (3), afilan sus lenguas como serpientes (4), preparan zancadillas a mis pasos (5), los soberbios me esconden trampas (6).
- Súplica: Líbrame (2), guárdame (2.5), defiéndeme (5), atiende a mis gritos de socorro (7), no le concedas sus deseos al malvado (9), no des éxito a su proyectos (9).
- Salvación: Mi fuerte salvador (8), cubres mi cabeza (8), yo sé que hace justicia al afligido (13), defiende el derecho del pobre (13), alabarán tu nombre (14), habitarán en tu presencia (14).


La luz del Nuevo Testamento


“El Hijo del Hombre será entregado en manos de los pecadores” (Mt 26, 45).
“Jesús gritó muy fuerte: Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu” (Lc 23, 46)
“Dichosos los perseguidos por su fidelidad, porque suyo es el Reino de Dios (Mt 5, 10).
“Si los sufrimientos de Cristo rebosan entre nosotros, gracias a Cristo rebosa en proporción  nuestro ánimo. A nosotros que tenemos la vida, continuamente nos entregan a la muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se transparente en nuestra carne mortal” (2 Cor 1, 5; 4, 11).


Oración


Poderoso Salvador nuestro,
atiende la oración de tu Iglesia.
Tú que haces justicia a los desvalidos
atendiste a Jesucristo en su Pasión.
Ayúdanos a soportar nuestros sufrimientos,
y líbranos del peligro de emplear la violencia.
Sé Tú siempre nuestra fuerza y nuestra salvación.